Ya no me entras más por los ojos
necesito solidamente estar a tu lado
respirar de tu voz, acariciar tu piel
borrar ese fantasma y palparte presente
Ya no me entras más por la mente
todo, absolutamente todo, está repleto de tí
necesito vaciarme para que entres más real
para que en tí vuelque yo algo de mí
Ya no me entras más en los días
el calor y la reincidente humedad
que empañan los pisos y las paredes de mi casa
alargan y hunden el tiempo que me separa de ti
Ya no me entras más de ninguna forma
he agotado las múltiples maneras de mirarte
mis dilatadas pupilas enceguecieron
mis brazos se cansaron de abrazar el aire
No encuentro explicación posible
al menos dentro de este mundo
que lleve a entender desesperadamente
¡por qué te miro tanto!