Dios Altisimo

“Jesus, el Cristo Salvador, hijo del Dios altísimo»
LC 1: 31-32

dios altísimo
que me arrugas la frente
cuando me resigno
todo gesto hacia tu deidad
son las sobras del
abismo en que gozo
lo que queda después
de buscarle sentido al niño
al niño dios altísimo
que alivia el calvario
en la promesa
la salvación de la carne
del destino final: la muerte

a no ser que vos también
estés muerto y ya no cumplís
los destinos
a lo mejor todo acabo
con la muerte de tu hijo
y no sos alto
sino uno mas
triste o feliz
sintiendo esto tan cercano al piso
harto de esperar el olvido
olvídenme por favor –dirías
mientras te rezan
la fe/ los creyentes
y explicas que
la altura/ el vértigo
no es posible
la redención/ el alma
no están
en los que amamos
ciegamente a las figuras
o sea todos
todos amamos al mismo amor
el triste o feliz
porque sentir/mentir
es estar cerca del piso
la tierra que nos cubre
el sentido/ la existencia
y que te llamen
recen abran
cátedras te llenen
de cadenas o te lean
es la ironía del dios muerto
buscar lo ya apartado
nombrar lo ausente
casi escritura
dios altísimo yo
escribo para altar
altarme subir rápido a
cualquier cielo
lejos de tu presencia.

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